Del campo a la moda de Gucci: la revolución sostenible de la lana uruguaya

La productora lanera, Gabriela Bordabehere, participó del primer encuentro de Agro en Punta y contó su exitosa experiencia.
Fecha de publicación: 22/02/2024
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La industria de la moda internacional vuelve sus ojos hacia Uruguay y destaca la excepcional calidad y prácticas sostenibles en la producción de lana merino, lideradas por productores como Gabriela Bordabehere, comprometidas con el bienestar animal y el respeto por el medio ambiente.

El 2023 fue un año de destacados reconocimientos en esta materia para la productora uruguaya, una de las caras visibles del programa de agricultura regenerativa Nativa Regen de Chargeurs Luxury Fibers, del grupo francés Chargeurs.

Por su forma de trabajar, la uruguaya fue elegida historia ejemplar del Informe de Impacto anual que realiza la marca europea de lujo, Gucci, cada año.

Meses antes, Bordabehere también recibió un importante premio de Acción climática y sostenibilidad otorgado por la Cámara Nacional de la Moda Italiana en los Sustainable Fashion Awards 2022 . El quehacer diario de Bordabehere en La Soledad, su establecimiento productivo ubicado en Tacuarembó fue plasmado en una pieza audiovisual y llamó la atención de Gucci por su compromiso con valores éticos de producción. En 2024, durante su participación en el panel "Alcanzando las metas sostenibles: huella ambiental e innovación en Uruguay" del encuentro Agro en Punta, Bordabehere compartió su emoción y orgullo por el reconocimiento de Gucci hacia su trabajo y los valores que promueve.

"No es menor ver que una empresa como Gucci pone la mirada en Sudamérica, en la historia de una mujer simple que trabaja en el medio rural y que tiene valores que ellos quieren promover. Quieren que sus productos tengan una historia de responsabilidad, de honradez, de trabajo, de visión de futuro, de una persona que sabe formar equipos de trabajo, promover a la gente, que trabaja por la comunidad local. Eso es lo que una gran empresa miró", afirmó.

El panel estuvo conformado también por la directora general del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca de Uruguay, Fernanda Maldonado, quien enfatizó en que el país es muy bien valorado a nivel mundial por su credibilidad científica y la vicepresidenta de la República, Beatriz Argimón, que destacó el extenso compromiso social de Uruguay con el ambiente y la producción sostenible.

"Uruguay viene con una musculatura que hoy se ve mucho más netamente como voluntad de políticas públicas bien claras," afirmó Argimón y también señaló el potencial de las lanas uruguayas en el mercado internacional y la posición distintiva del país debido a su estabilidad y seriedad en materia agroexportadora.

La sostenibilidad colectiva como bandera

Para Bordabehere, el trabajo con Gucci, lejos de ser un logro individual fue fruto de un proyecto colectivo que involucró a 13 productores bajo el paraguas de la agricultura regenerativa, del proyecto NATIVA Regen de Chargeurs. Esta conexión con la marca de moda no solo representó un hito comercial, también fue una validación de los valores y prácticas que defienden.

"Cuando estaba en la Scala de Milán, antes de recibir el premio, me comentan desde el sector de Sustentabilidad de Gucci que habían hecho pruebas con las lanas uruguayas y destacaban su excelencia", explicó sobre este reconocimiento internacional.

“Las grandes marcas están poniendo su foco en algo que para nosotros es normal, es parte de nuestro trabajo diario y de muchos productores uruguayos: cuidar el medio ambiente, cuidar la tierra, cuidar los animales, usar normas de bienestar animal y cuidar a nuestra gente, a nuestro equipo de trabajo. Es algo que se presenta como novedoso, pero acá en Uruguay lo hacemos habitualmente. Uruguay le está mostrando al mundo su forma de trabajar,” comentó Bordabehere a Uruguay XXI.

Su establecimiento La Soledad, de 1.266 hectáreas, se encuentra próximo a San Gregorio del Polanco, en Tacuarembó, rodeado por el Río Negro. Se trata de un campo íntegramente de arena, con un sistema de producción mixto de vacunos y lanares y una producción de forraje estival. Una vez que la lana sale de La Soledad va hacia el proceso de peinaduría de Lanas Trinidad, para muchos, líder en prácticas de economía circular.

“Nuestro sistema de trazabilidad permite identificar la lana durante todo el proceso de industrialización desde la estancia hasta la entrega del producto a nuestros clientes”, cuentan desde la compañía uruguaya.

El gran aprendizaje durante su pasaje por Italia fue reconocer que hay una tendencia de las grandes marcas a cambiar el mundo. “Los productores en Uruguay tenemos esa oportunidad trabajando, cuidando la tierra, cuidando la biodiversidad, nuestro ambiente y también cuidando a nuestra gente," enfatizó en Agro en Punta Bordabehere, subrayando el papel crucial que juega en el éxito de sus iniciativas el compromiso con el medio ambiente y la comunidad.

“Estamos elaborando productos de altísima calidad. El esfuerzo que desde Uruguay se hace da sus frutos. No solamente hay esfuerzos personales, también hay esfuerzo de instituciones que están trabajando en el tema de la genética y mejoramiento del producto final de lana”, aclaró.

El trabajo de Bordabehere ha sido de la mano, entre otros, del Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (INIA). “Hay muchos años de investigación e información que nos brindan a los productores para mejorar nuestro producto”, evaluó.

 Consultada acerca de los valores que le inspiran en su trabajo, Bordabehere dijo que “lo primero es poner pasión en lo que se hace, responsabilidad, asesorarse con gente que sabe, que son los técnicos que están al servicio del productor uruguayo como el Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL) y el INIA. Hay que formar buenos equipos de trabajo. Lo que se ve en la Soledad es gente alegre, comprometida, todos alineados en sacar la empresa adelante”, concluyó.


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